Día mundial de la hipertensión arterial

La hipertensión arterial (HTA) es una de las principales causas de muerte prematura en el mundo que se estima que padecen 1.130 millones de personas en todo el mundo. Tiene una elevada prevalencia en España, afectando al 35% de los adultos y que alcanza el 70% en los mayores de 60 años, lo que significa que hay 10 millones de adultos con HTA en nuestro país.

Existe un alto conocimiento sobre esta enfermedad y su tratamiento, sin embargo, menos del 40% de los pacientes tienen controlada su HTA. Este dato es alarmante, ya que la HTA es un trastorno grave que ha demostrado que aumenta de manera significativa el riesgo de sufrir cardiopatías, encefalopatías, nefropatías y otras enfermedades.

Para concienciar sobre esta realidad a la población el 17 de mayo se conmemora el Día Mundial de la Hipertensión con el objetivo de dar a conocer a la población cuáles son los niveles de presión arterial óptimos y qué recomendaciones deben seguir para prevenirla o para mantenerla bajo control.

Se denomina presión arterial (PA) a la fuerza que ejerce la sangre circulante contra las paredes de las arterias. Esta fuerza se origina con el latido cardiaco que lanza la sangre desde el corazón y la distribuye por las arterias. Las cifras óptimas de PA están en 120 mmHg (máxima o sistólica) y 80 mmHg (mínima o diastólica). Cuando la presión arterial es demasiado elevada, hablamos de hipertensión arterial. Se considera que existe HTA cuando la presión arterial sistólica es mayor o igual a 140 mmHg o cuando la presión arterial diastólica es igual o mayor de 90 mmHg.

Factores de riesgo de la hipertensión

Factores de riesgo modificables.

  • Dietas no adecuadas: elevada ingesta de sal, dietas ricas en grasas saturadas, dietas pobres en frutas y verduras.
  • Sedentarismo y falta de actividad física
  • Tabaquismo
  • Consumo excesivo de alcohol
  • Sobrepeso y obesidad
  • Altos niveles de estrés

Factores de riesgo no modificables.

  • Antecedentes genéticos de HTA
  • Edad: >55 años en hombres y > 65 años en mujeres.
  • Sexo: el riesgo cardiovascular en hombres es mayor.
  • Cambios hormonales: la llegada de la menstruación puede aumentar la presión arterial.
  • Presencia de otras patologías (diabetes, nefropatías)

Como esta enfermedad no suele ir acompañada de síntomas o signos de alarma que puedan alertar, los pacientes hipertensos suelen desconocer que lo son. Solo en las ocasiones en las que la tensión arterial es muy elevada se pueden notar síntomas como dolor de cabeza, calor corporal, hemorragias nasales, ritmo cardiaco irregular y, en casos más extremos, fatiga, confusión y ansiedad. La hipertensión mantenida en el tiempo dará lugar a diferentes síntomas en función del órgano afectado y el grado de afectación. Por todo ello, es importante conocer cuál es nuestra tensión arterial. Para que la medición de nuestra tensión arterial sea fiable te dejamos algunos consejos.

Consejos para medir tu Presión Arterial

    • No fumar ni consumir bebidas estimulantes (café o alcohol) 30 minutos antes.
    • Estar tranquilos y no tener prisa.
    • Sentados con la espalda bien apoyada en el respaldo de la silla, las piernas deben estar tocando el suelo y no cruzadas.
    • La mano del brazo donde vamos a realizar la medida relajada, sin apretar y en posición de descanso, más o menos a la altura del corazón. 
    • Hacer la medición tras un periodo de reposo de aproximadamente 10 minutos
    • Se recomienda medir tres veces y hacer la media. Una medida aislada de HTA no es concluyente para diagnosticar HTA.

El tratamiento de la HTA se basa en cambios en el estilo de vida, dieta, ejercicio y tratamiento farmacológico. Se ha demostrado que para reducir la morbimortalidad cardiovascular es fundamental tanto el tratamiento farmacológico como no farmacológico. A continuación, te dejamos algunos consejos para reducir tu presión arterial.

Consejos para reducir la Hipertensión

  • Reduce tu peso
  • Reduce la ingesta de sal 
  • Reduce el consumo de grasas saturadas
  • Realiza actividad física moderada. Caminar al menos 30 minutos al día
  • Aumenta el consumo de frutas y verduras
  • Deja de fumar
  • Reduce la ingesta de alcohol
  • Duerme las horas necesarias
  • Práctica actividades que favorezcan la relajación