Día mundial de la hepatitis vírica

El día mundial de la hepatitis promueve la educación y comprensión de la enfermedad viral como un problema mundial de salud pública

Desde el año 2008, la Organización Mundial de la Salud (OMS) celebra cada 28 de julio el Día Mundial contra la Hepatitis Vírica.

La idea de esta celebración es la educación y una mayor comprensión de las hepatitis virales como el problema mundial de salud pública que representan, así como para fortalecer las medidas de prevención y control de dicha enfermedad a nivel mundial.

Con la celebración de este día, la OMS se ha planteado alcanzar varios objetivos a nivel mundial:

  • Disminuir en un 90% la probabilidad de nuevas infecciones de hepatitis en cualquiera de sus presentaciones A, B,C, D o E
  • Evitar el 65% de las muertes que año tras año produce esta enfermedad

¿Qué es la hepatitis vírica?

La hepatitis vírica es una infección que produce una inflamación aguda en el hígado. En la mayoría de los casos, la inflamación del hígado comienza de forma súbita y solo dura unas pocas semanas.

Existen 5 virus diferentes de la hepatitis, A, B, C, D y E.

La hepatitis A se adquiere a través de los alimentos o del agua contaminada por el virus. La principal vía de transmisión es la fecal-oral, sobre todo en países con falta de higiene y aguas contaminadas.

La Hepatitis B, a través del contacto con sangre y/o fluidos corporales, al mantener relaciones sexuales sin protección, al compartir jeringuillas así como utensilios de higiene personal (cepillos de dientes, cuchillas de afeitar), al realizar acupuntura, tatuajes y/o piercings en condiciones higiénico sanitarias deficientes, y de madre a hijo durante el momento del nacimiento y la lactancia.

La hepatitis C se contagia también mediante contacto con sangre de una persona infectada por el virus.

Juntas, las hepatitis B y C son la mayor causa de muerte, con 1,4 millones de defunciones al año.

En ausencia de vacunación, la hepatitis B es el tipo más frecuente de hepatitis diagnosticada que, en la mayor parte de los casos, supone una infección aguda que se resuelve totalmente, aunque en ocasiones pueda cronificarse. La hepatitis C es la que más se cronifica y evoluciona a cirrosis con mayor frecuencia.

La mayoría de los casos de hepatitis E son derivados de zoonosis y están relacionados con la cabaña porcina principalmente. La infección se transmite a los humanos por comer carne contaminada mal cocinada y puede derivar en una hepatitis aguda.

En España, la hepatitis es una Enfermedad de Declaración Obligatoria (EDO), es decir, tiene que notificarse al Sistema de Enfermedades de Declaración Obligatoria, sistema básico de la Red de Vigilancia Epidemiológica.

En España, casi millón y medio de personas son portadoras del virus B o C de la hepatitis, aunque sólo el 10% lo sabe.

día mundial de la hepatitis vírica